Las primeras comunidades cristinas proclamaron que un hombre de nuestra raza presente en nuestra raza presente en nuestra historia era el hijo de Dios.
Jesús fue un hombre como los demas:los Evangelios lo presentan en todo su humanidad.Era pues igual a nosotros en todo menos en el pecado.Jesús se encontraba totalmente abierto a la voluntad de su Prade y al servecio de las personas.Es el hombre para los otros hombres.
sábado, 7 de marzo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario